04 abr 2013 Solo aquellos con el Sello del Dios Vivo escaparán a esta forma de genocidio del alma

06.04.2013 13:23

Traducción latinoamérica

Jueves 04 de abril de 2013 19:45 hrs.

 

Mi amadísima hija, no debes escuchar a aquellos que cuestionan, desafían y se burlan de Mis Mensajes. No es necesario defender Mi Santísima Palabra. Mi Palabra es definitiva y ningún hombre tiene la autoridad para cuestionarla. O me aceptan, o no.

Mientras los Cristianos luchan entre sí por estos Mensajes, que fueron profetizados hace tanto tiempo, se tratan mutuamente como enemigos. No se puede ser un enemigo de vuestro hermano o hermana y llamaros a sí mismos Mi discípulo. Mientras estáis tan ocupados gritando entre vosotros, el mayor enemigo, los ejércitos de Satanás están planeando las más malvadas atrocidades, jamás presenciadas por la humanidad desde la creación de Adán y Eva.

Las guerras de las que hablé están a punto de iniciarse y el plan será eliminar a las poblaciones. Podéis pensar que estas guerras son entre un país y otro, pero estaríais equivocados. Las armas vendrán de una sola fuente.

Mis pobres hijos de Dios, qué poco sabéis de los terribles actos, que están siendo tramados por las sectas masónicas en los más altos niveles en contra de los hijos de Dios. Su maldad sería imposible de imaginar para vosotros, pero reconozcan estas señales. Cuando vuestros bancos os quiten vuestra libertad, vuestros hogares y vuestra capacidad para alimentar a vuestras familias, esto será solo una parte de su plan en contra de la humanidad. Vosotros os convertiréis en esclavos, pero aquellos que me rendís lealtad a Mí y a Mis Enseñanzas y que permanecéis leales a Mí, no  os debéis olvidar nunca de Mi Misericordia.

Si bien estas revelaciones pueden ser aterradoras, son la Verdad. Al estar preparados para estos actos en contra de la creación de Dios, ayudaréis, a través de vuestras oraciones, a mitigar gran parte del sufrimiento, que estas sectas malignas infligirán sobre vosotros. Mientras que vuestras oraciones diluirán el impacto de tales atrocidades, estas, si son entregadas a Mí con amor en vuestros corazones, serán utilizadas para salvar a aquellos culpables de tales hechos terribles. Y aunque estas almas descarriadas y frías de corazón, continúen desafiándome, al tratar de erradicar las poblaciones del mundo, trataré de iluminar sus corazones para que puedan alejarse de este terrible lazo con Satanás. Muchos están completamente poseídos por el maligno y para algunos hay pocas esperanzas. Solo un milagro concedido por Mi Misericordia, en unión con aquellos que me ofrecen el regalo del sufrimiento, puede salvarlos.

Aquellos entre vosotros que me maldicen, a través de su cruel rechazo de Mí, me rogarán por Misericordia cuando estos acontecimientos ocurran. Cuando seáis forzados a sufrir y aceptar la marca de la bestia, o morir, clamaréis por Mí. Entonces os apresuraréis a encontrar el Sello del Dios Vivo, que doy al mundo a través de Mi Padre en estos Mensajes -pero para entonces será demasiado tarde. Solo aquellos que aceptan el Sello, lo guardan en sus hogares, o lo llevan en ellos estarán protegidos. Solo aquellos con el Sello del Dios Vivo, escaparán a esta forma de genocidio del alma.

No dudéis ni por un minuto, Mis Mensajes dados a vosotros ahora. Aceptad Mi intervención Divina, porque Yo solo quiero salvaros. La batalla por las almas es de tal magnitud, que si no interviniera Yo, a través de los profetas, muchos de vosotros estaríais del lado de la bestia y todos sus seguidores, quienes se presentan ante vosotros como lobos con piel de oveja.

Satanás es extremadamente astuto, y nunca presentaría sus malvadas obras como lo que son. No, en cambio, él las presentará como siendo buenas, inspiradoras y bastante para vuestros intereses. Esta es la trampa que él pone. Así es como él atrae almas inocentes bien intencionadas a su guarida. La forma en que Satanás se revelará a sí mismo, a través de estas pobres almas que se las arregla para ganar, será a través del pecado de orgullo. El pecado, en su forma más perversa, será visto dentro de esas personas en los lugares de posición alta, quienes destruirán a otros para su propio beneficio egoísta. En la parte inferior de la escala, el pecado de orgullo será presenciado entre vosotros cuando juzguéis a otros, habléis mal de ellos y luego tratéis de arruinar su personalidad, así como dañar su reputación, en Mi Nombre.

Os digo estos tristes hechos, para que Yo pueda prepararos, armaros con Mi amorosa protección, para que pueda ayudar a salvar aún a los que marcharán a través de la Tierra para devorarla.

Vuestro Jesús