07 abr 2011 Millones de almas se salvarán a través de estos Mensajes

26.09.2012 00:50
 

Jueves 7 de abril de 2011 a las 22:00 hrs.

Mi amada hija, el Don del Espíritu Santo te fue otorgado hoy junto con gracias Divinas especiales. Tú, hija Mía, habiendo entregado tu libre albedrío, pasarás a hacer Mi Santísima Voluntad. Ahora te darás cuenta de la importancia de la total obediencia a Mí en tus pensamientos, palabras, hechos, comportamiento y actitud. Seguirás ahora Mi guía y la buscarás antes de iniciar cualquier acción en Mi Nombre.

Finalmente, estás preparada para seguir Mis instrucciones. Ahora necesitas dedicarme por lo menos dos horas en oración, cada dos días. Además debes seguir las indicaciones del más santo director espiritual que se te ha enviado del Cielo. Él te hablará como Yo se lo instruyo. Haz exactamente lo que él dice. Debes asegurarte de comunicarte Conmigo diariamente porque tengo mucho que decirte.

Hija Mía, de ahora en adelante, escucha solo Mi Voz. Solo escribe lo que recibas de Mí. Nunca tomes las interpretaciones de los demás sobre estos santísimos mensajes. Solo existe una boca con la que me comunico contigo y es la Mía. Confía en Mí hija Mía, confía plenamente en Mí. Nunca cuestiones estos mensajes, porque soy Yo hablando contigo. Recuerda esto siempre. Ahora que confías en Mí, serás mucho más fuerte. Déjame garantizarte que serás capaz ahora de lidiar de manera más efectiva con los ataques del engañador.

Siéntete en paz. El amor por ti, hija Mía, está aumentando inmoderadamente y súbitamente en Mi Corazón, mientras tu devoción y amor por Mí te llena y te hace débil. Este poderoso amor es puro en su totalidad y no se puede comparar con nada que hayas experimentado antes en este mundo.

El Cielo se regocija con tu entrega final. Pero ahora tendrás que prepararte para ayudar a salvar millones de almas. Hija Mía, la tarea que te pido es enorme en términos humanos. Tú, hija Mía, serás la mensajera para el mundo de la cantidad más grande de Mi Santa Palabra al mundo, para prepararlo para Mi Segunda Venida.

Ellos, Mis preciados hijos, a quienes amo con una profunda pasión que va más allá de su conocimiento, deben ser traídos de vuelta a Mi Sacratísimo Corazón antes de que sea demasiado tarde. Se espera de ti, hija Mía, que entregues Mi Palabra a la humanidad. Esta no es una tarea fácil. Sufrirás a causa de ello, pero debes comprender que ahora este es tu deber para Conmigo. Estas siendo llamada para garantizar que, a través de la Palabra de Mis Divinos labios, millones de almas se salven del fuego del infierno.

Ahora comunícate Conmigo apropiadamente. Te guiaré todo el tiempo. La paz sea contigo, hija Mía. Mi Santísimo Espíritu está ahora inundando tu alma. Ahora estás llena de amor y gozo y preparada para la siguiente etapa de esta Misión Divina.

Tu Salvador

Jesucristo