4 ene 2015 Aquellos que ante Mí se exaltan, pero hablan mal de los demás serán apartados de Mí

20.01.2015 21:11

 

Domingo 4 de enero de 2015 a las 16:00 hrs.

Mi muy querida bienamada hija, si un hombre que no cree en Mí o en Mi Palabra, y a quien se le da el don de discernimiento, viene a Mí y pide Mi Ayuda y Mi Misericordia, voy a redimirlo y a darle la salvación. Si un hombre que me conoce pero me traiciona, y luego viene a Mí, y trata de defender sus acciones, Yo lo desecharé/rechazaré  porque ha cometido el peor pecado.

Mis mayores enemigos son aquellos que han sido bendecidos con la Verdad, pero cuyo orgullo les hace creer que ellos tienen el privilegio de actuar en Mi Nombre. Fui traicionado por uno de los Míos cuando anduve/caminé en la tierra, no por aquellos que no me conocían. Esto mismo siempre será así, hasta el momento del Gran Día. 

Aquellos que ante Mí se exaltan, pero hablan mal de los demás serán apartados de Mí. Aquellos que están apartados de Mí porque me rechazan, pero que finalmente recurren (se vuelven) a Mí, serán salvados primero. Tengan cuidado cuando proclaman que son Míos, porque el hombre sabio me amará  sin importar las Gracias que recibe. Él nunca presumirá de su santidad, su vida devota o de su entendimiento/conocimiento de Mi Palabra. El orgullo es la caída de los que creen que su conocimiento acerca de Mí es superior al de los demás. Los que vienen a Mí como niños son a los que Yo acercaré a Mi Sagrado Corazón. Estas son las almas que me aman incondicionalmente y quienes no sienten necesidad de exhibir/presumir su amor por Mí, para que los demás los admiren y los respeten. El hombre que deja todo en Mis Manos, cuando dice la Verdad, es quien me trae las almas que deseo, no el hombre que siente que merece grandes elogios por hacer eso.

El maligno gana entrada en las almas de aquellos cuya opinión sobre su propia grandeza a Mis ojos, supere/sobrepase todo amor que puedan tener por Mí. Él (el maligno) entonces utiliza a estas almas para que ellos con su astucia, propaguen falsedades en Mi Nombre. El pecado del orgullo es la principal causa de todo pecado concebible contra Mí. Ustedes deben esforzarse siempre para luchar contra la tentación de traicionarme cuando crean que algún conocimiento sobre Mi Santa Palabra les da la autoridad para expresar su opinión respecto a cómo trabaja Dios, en Su Plan de Salvación. Solo Él, Quien está por encima de todo, tiene el derecho de hacer esto. Todas las almas deben doblar la rodilla ante Él y no dar zancadas/pasos agigantados adelantándose para hacer lo que ellos piensan que es Su Santa Voluntad, si esto significa insultar a cualquier alma/persona viva en Su Santo Nombre.

Escuchen atentamente lo que les digo ahora: Si han traicionado Mi Palabra, o la Verdad, deben pedirme que los librelimpie de sus iniquidades porque no les será dado el tiempo que piensan para buscar consuelo en Mi Divina Misericordia.

Su Jesús